El interés visceral del arte reside justo en esta cuestión: nunca se posee, siempre se escapa a otros territorios para que el hombre se abra hacia él, insatisfecho y esperanzado, y que siga buscándolo para siempre.
Marta Zatonyi en Arte y creación: los caminos de la estética

El espacio


Podemos definir al espacio de muchas maneras, entre ellas como:

  1. Dimensión, extensión, relación en­tre los objetos
  2. Continente de los mismos. 
  3. Dirección en todos los sentidos
  4. Sugerencia de profundidad o volumen plástico en una superficie bidimensional.
  5. Fenómeno psicológico a través del cual la fi­gura se separa del fondo, permitiendo que éste "pase" de manera ininterrumpida por detrás de aquélla, lo que es percibido como distancia inde­finida entre ambos términos.
  6. Experiencia perceptual a través de las posicio­nes, direcciones, distancias, tamaños, movimientos y formas de los cuerpos en relación. Estos factores se definen siempre con respecto a ejes o puntos de referencia en lo que hace a la distancia, posición, movimiento y dirección; a unidades en cuanto al tamaño y a la relación de partes en cuanto a la forma. La percepción del espacio implica para el ser vivo, acción en el espacio, a cuya va­loración concurren la determinación de los ejes y coordenadas potenciales (vertical-horizontal; arri­ba- abajo; derecha-izquierda; adelante-atrás), por medio de los sentidos de la vista el tacto, el oí­do, el órgano del equilibrio y la sensibilidad. 
Visión binocular
El sentido visual proporciona las más importan­tes nociones sobre las propiedades del espacio; para el mismo, la visión binocular es la que per­mite realmente tener la noción de la profundidad plástica del espacio por medio de la fusión de am­bas imágenes monoculares
La profundidad del campo visual respecto de los objetos en el espa­cio está dada por los procesos de acomodación y convergencia. El re­sultado de la acción conjunta de estos tres proce­sos de la facultad visual, se llama visión estereos­cópica, pero la percepción del espacio no depende solamente de las condiciones fisio­lógicas sino también de las psicológicas. Así, se perciben una serie de fenómenos visuales sobre el plano de la imagen, tales como: 
  • Figura - Fondo 
    Todos los cristales son, por lo general, anisótropos.
  • Superposición
  • Distorsión 
  • Anisotropía
  • Color 
  • Avance y retroceso
  • Gradientes 
  • Tamaño
  • Luminosidad
  • Tensión
  • Entre figuras: contraste, dirección, orientación, posición
Tales fenómenos son conside­rados, entre otros factores, como determinantes de percepción espacial.
Relación entre figura y fondo por superposición de figuras y diferencia de tono.
Espacio ambiguo:

Convexo y cóncavo; M.C. Escher; 1955.
Fenómeno de la percepción vi­sual por el cual un mismo signo o esquema da dos o más posibilidades de interpretación espacial sin que predomine netamente una de ellas.
La percepción ambigua pa­ra un mismo patrón puede experimentar­se en forma sucesiva en conjuntos límites de gran inestabilidad; también puede ser inmediata como en los casos de transparencia o superposición recíproca. Algunos autores como R. G. Scott o G. Kepes llaman a este doble carácter perceptual, espacio equívoco
Este prin­cipio es utilizado por algunos artistas y tam­bién por corrientes contemporáneas en la búsque­da de un nuevo espacio, como recurso para exal­tar la relatividad de los valores de la representación tradicional 

Espacio arquitectónico:

Espacio habitable tridimensional que incluye al hombre. Espacio interior de un edificio. El desarrollo del espacio arquitectónico va desde los volúmenes o masas aisladas (celdas) hasta el espacio interpenetrado contemporáneo, en el que interior y exterior se relacio­nan constantemente, articulando las fuerzas espa­ciales puestas en juego, en lo cual la noción de espacio -tiempo cobra un papel fundamental. En este caso se ha agregado al espacio una cuali­dad temporal.



Perspectivas; Tatiana Bilbao.
Misterio y melancolía de una calle; Giorgio de Chirico; 1914.
Espacio bidimensional:

Espacio de representación sobre el plano de la imagen. Superficie limitada de dos dimensiones. Diseño sobre una superficie plana sin sugerencias de profundidad. En general, se relaciona con todo espacio de representación que elude la ilusión de profundidad como recurso de énfasis plástico. Se origina en la utilización de los sistemas, indicaciones o conceptos de espacio a cuyo través reciben representación los acontecimientos espacio-temporales so­bre el plano de la imagen

Espacio escultórico:

Espacio plástico tridimensional propio del desarrollo de este arte. Organiza­ción que se da en el espacio físico como rela­ción de volúmenes. Estos pueden ser convexos, cerrados y auto-continentes como la escultura tradicional o cóncavos e interpenetrados por el espacio mis­mo, como en el arte contemporáneo, donde ambos términos, concavidad-convexidad, asumen alterna­tivamente el papel de figura o aparecen compensados en la distribución. El espacio circundante toma así un papel activo revelando las fuerzas per­ceptuales puestas en juego. 
En las esculturas móviles de Calder, se manifiesta una nueva posibilidad del espacio escultórico median­te piezas articuladas, sostenidas en equilibrio di­námico incluyendo el movi­miento como materia sensible de la obra de arte.

Espacio euclídeo o euclidiano

Espacio matemá­tico tridimensional en el cual se imponen determinados axio­mas euclídeos de la distancia. Estos axiomas son en cierto modo los más simples que la mente hu­mana puede concebir, pues existe una suerte de inercia mental en el individuo para condicionar la realidad del espacio exterior de acuerdo a ellos, de lo que surge a la vez el concepto de tridimen­sionalidad propio de la pintura a partir del Rena­cimiento. Esta organización geométrica del espa­cio de representación plástica, fundada en el co­nocimiento reflexivo de las leyes de Euclides y en la interdependencia de todas las estructuras uni­versales, halló concreción en el sistema de reduc­ción perspéctico de los objetos mediante el cálcu­lo proporcional de las distancias y la visión mo­nocular, creando en el cuadro una suerte de re­ducción del universo en el que se representan a escala ideal las leyes físicas y ópticas

Espacio horizontal-vertical:

Espacio de elevación y extensión sobre el plano de la imagen como po­sibilidad elemental de sus dimensiones de alto y ancho; es propio de la representación primitiva e infantil, aunque tendencias contemporáneas redu­cen su representación a este espacio con diversos propósitos.